SPREAD LOVE

Si estás buscando una receta saludable, sabrosa y libre de nata, este pastel de puerro y calabacín sin nata es perfecto para ti. Ideal para quienes siguen una dieta baja en grasas o para personas intolerantes a los lácteos, esta versión conserva todo el sabor sin necesidad de ingredientes pesados. Además, es una excelente forma de incorporar verduras a tu dieta diaria sin renunciar al disfrute.

Tabla de contenido

A diferencia de muchas quiches tradicionales, esta receta no incluye crema ni masa base. Se trata de un pastel salado ligero que se cocina directamente en el horno con una mezcla de huevos, leche y vegetales. Además, gracias a ingredientes como el puerro, no solo ganas en sabor, sino también en nutrientes. Puedes conocer más sobre las propiedades del puerro, que destaca por ser diurético, digestivo y bajo en calorías.

El calabacín aporta textura y humedad natural al pastel, sin necesidad de recurrir a natas o cremas. Es una verdura rica en agua y fibra, ideal para platos que buscan ligereza y volumen. Si te interesa conocer más sobre sus beneficios, te recomendamos este artículo sobre los beneficios del calabacín, donde se destacan sus propiedades antioxidantes y su papel en dietas hipocalóricas.

Ingredientes para 4 porciones

1 calabacín mediano
1 puerro grande

200 ml de leche (puede ser vegetal)
3 huevos
25 g de queso parmesano rallado

1 cucharadita de maicena
Sal al gusto
Aceite de oliva virgen extra

Utensilios necesarios

Molde para bizcocho o pastel
Sartén
Bol para mezclar

Batidor manual o tenedor
Cuchillo y tabla de cortar
Papel de horno o mantequilla para el molde

Tiempo de preparación

Tiempo total: 40 minutos
Preparación: 20 minutos
Horneado: 20 minutos

Comensales: 4

Preparación paso a paso

Precalienta el horno a 180 ºC.
Lava y corta el puerro en rodajas finas. Sofríelo a fuego lento con un poco de aceite de oliva y sal hasta que esté bien pochado.

Mientras tanto, corta el calabacín en cubos pequeños (1 cm aprox), sin pelarlo.
Retira el puerro de la sartén y sofríe el calabacín con el mismo proceso.
En un bol, bate los huevos y añade la leche. Mezcla bien.

Incorpora la maicena, el queso parmesano y las verduras cocinadas.
Vierte la mezcla en un molde engrasado o forrado con papel de horno.
Hornea durante 20 minutos o hasta que cuaje y se dore ligeramente.

Deja reposar 5 minutos antes de desmoldar y servir.

Sugerencias de acompañamiento

Setas salteadas con salsa de soja y semillas de sésamo
Ensalada de rúcula y tomates cherry

Gambas al ajillo, si deseas un toque marino

Variaciones de la receta

Sustituye el puerro por espinacas o zanahoria rallada para cambiar el perfil de sabor
Utiliza bebida vegetal (como soja o almendras) para una versión sin lactosa

Agrega nueces o pipas de girasol a la mezcla para darle textura
Añade cúrcuma o comino para un toque especiado

Trucos para un pastel perfecto

No excedas la cocción de las verduras, deben quedar tiernas pero no aguadas

Si deseas más consistencia, añade 1 cucharada extra de maicena
El molde ideal es uno de silicona o desmontable, para facilitar el desmoldado
Usa calor arriba y abajo sin ventilador para una cocción más uniforme

Conservación y recalentado

Puedes guardar el pastel en la nevera hasta 3 días, bien cubierto
Para recalentarlo, usa horno a 160 ºC durante 10 minutos
También se puede congelar en porciones, ideal para meal prep

Preguntas frecuentes

¿Qué pasa si no uso nata en un pastel salado?
Nada grave. Al usar leche (incluso vegetal), los huevos y la maicena ayudan a dar estructura al pastel sin necesidad de nata.

¿Puedo hacerlo sin queso?
Sí, aunque el parmesano aporta sabor, puedes eliminarlo o sustituirlo por levadura nutricional o queso vegano.

¿Qué otras verduras se pueden usar?
Champiñones, cebolla caramelizada, espinacas o incluso berenjena.

¿Cuánto tiempo dura en la nevera?
Hasta 3 días en recipiente hermético.

¿Cómo hacerlo más consistente?
Añade más huevos o una cucharada extra de maicena.

¿Se puede hacer completamente vegano?
Sí. Usa leche vegetal, reemplaza el huevo con harina de garbanzo o linaza hidratada y omite el queso.

Conclusión

Este pastel de puerro y calabacín sin nata es una receta ideal para cualquier ocasión: comidas ligeras, cenas saludables o incluso como parte de un brunch vegetariano. Además de ser fácil de preparar, es nutritivo, versátil y económico. Si te apasiona la cocina sana, echa un vistazo también a estas recetas vegetarianas caseras para seguir explorando nuevos sabores sin renunciar a lo saludable.