Leche frita muy cremosa: Un postre rico y fácil de hacer

La leche frita muy cremosa es uno de los postres más tradicionales y deliciosos de la gastronomía española. Es especialmente popular durante la Semana Santa, pero su sabor tan suave y su textura cremosa la hacen ideal para disfrutar todo el año. Esta receta, inspirada por Recetas de Esbieta, es perfecta para quienes buscan un postre casero, económico y lleno de sabor.

Prepararla no solo es sencillo, sino que también es una excelente manera de conocer más sobre la repostería tradicional. Si te interesa la historia detrás de este dulce, puedes leer sobre su origen cultural y regional en Wikipedia, donde se detallan sus raíces y evolución en las distintas zonas de España.

La magia de esta receta está en lograr una crema suave y fundente que se derrite en la boca. La clave está en la proporción de ingredientes y en la técnica al cocinarla. Para los que buscan perfeccionar sus habilidades en repostería, Directo al Paladar ofrece una guía útil sobre técnicas básicas de cocina para postres que puede ayudarte a evitar errores comunes y mejorar el resultado final.

Ingredientes para una leche frita muy cremosa

Estos son los ingredientes básicos que necesitarás para aproximadamente 12 porciones:

• 500 ml de leche entera
• 60-80 g de harina de trigo (dependiendo de la consistencia deseada)
• 75 g de azúcar
• 2 yemas de huevo
• 1 rama de canela
• Piel de 1 limón (sin la parte blanca)
• 2 pizcas de sal
• Harina adicional para rebozar
• Huevos batidos para rebozar
• Aceite para freír (de girasol o de oliva)
• Azúcar y canela para espolvorear

Paso a paso para preparar la crema perfecta

La base de una leche frita muy cremosa es una crema similar a la pastelera. Sigue estos pasos para conseguir una textura ideal:

1. En un cazo, mezcla la leche, el azúcar, la rama de canela y la piel de limón. Lleva a ebullición y retira del fuego.
2. Deja infusionar tapado durante 10-15 minutos.
3. En un bol aparte, mezcla la harina, las yemas, la sal y parte de la leche restante hasta formar una mezcla sin grumos.
4. Quita la canela y el limón de la leche infusionada y añade la mezcla de harina.
5. Cocina a fuego medio, removiendo constantemente hasta que espese.
6. Vierte la crema en un recipiente forrado con film transparente y deja enfriar primero a temperatura ambiente y luego en la nevera al menos 3 horas (idealmente toda la noche).

Cómo freír la leche sin que se deshaga

Una vez que la crema esté firme y fría:

• Espolvorea una tabla con harina y vuelca la masa.
• Córtala en cuadrados o rectángulos pequeños.
• Pasa cada pieza por harina, luego por huevo batido.
• Fríe en aceite caliente hasta que estén doradas por fuera.
• Retira y escurre sobre papel absorbente.
• Espolvorea con azúcar y canela al gusto.

Trucos para una textura ideal

• Usa menos harina (60 g) si deseas una crema más suave y cremosa.
• Si prefieres que sea más firme y fácil de manipular, usa 80 g.
• La espátula de goma es ideal para remover sin que se pegue la mezcla.
• Para evitar que se formen grumos, mezcla muy bien antes de añadir al cazo.

Variaciones creativas

Puedes darle un toque personal a tu leche frita con estas ideas:

• Añadir extracto de vainilla, ralladura de naranja o incluso chocolate fundido.
• Rellenar con mermeladas, cremas o frutas.
• Presentarla en platos individuales con coulis o sirope.

Versión saludable de leche frita

¿Buscas una opción más ligera?

• Usa leche vegetal (almendra, avena, arroz).
• Reemplaza el azúcar por edulcorantes naturales como la stevia.
• Cocina al horno o en freidora de aire en lugar de freír en aceite.

Preguntas frecuentes

¿Por qué se llama leche frita?
Porque la crema se hace a base de leche, se enfría, se corta y luego se fríe, dándole su nombre literal.

¿Cómo evitar que se deshaga al freírla?
Enfría muy bien la masa. Usa harina suficiente para lograr firmeza. Manipula con cuidado.

¿Cuánto tiempo se conserva?
Se puede guardar en la nevera hasta 4 días, bien tapada. No se recomienda congelar.

¿Qué hacer si queda muy líquida?
Probablemente necesitó más cocción o más harina. Puedes recalentarla y añadir un poco más de almidón disuelto.

¿Qué tipo de harina es mejor?
Harina de trigo común. También puedes usar maicena para una textura más fina y sin gluten.

¿Puedo hacerla sin huevo?
Sí, puedes sustituir por mezclas veganas para rebozar o usar solo leche y harina.

¿Cuál es el mejor momento para servirla?
Cuando aún está tibia por dentro y crujiente por fuera, justo después de freír.

Consejos finales de presentación

• Sírvela en una bandeja bonita con un toque de canela espolvoreada.
• Acompaña con un café o vino dulce.
• Puedes preparar una versión mini para tapas dulces o postres individuales.

Opinión final y recomendación

Hacer leche frita muy cremosa en casa es un placer sencillo que te conecta con lo mejor de la repostería tradicional española. Siguiendo estos pasos y consejos, lograrás una textura suave, un sabor profundo y una presentación digna de cualquier celebración. ¿A qué esperas para prepararla?

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